Con Puerto Rico consagrándose como campeón invicto del Centrobasket 2021 en la jornada del sábado, alzándose con el oro y repitiendo una vez más su condición de protagonista, el día domingo fue tiempo de definiciones para el resto del podio con las medallas de plata y bronce. Con el cierre del torneo, también fue lugar para las distinciones individuales, con las jugadoras más valoradas que se dieron cita durante estos últimos días en El Salvador.
La capitana de Puerto Rico, Pamela Rosado, fue elegida como la MVP del torneo después de una actuación brillante. El quinteto estelar del Centrobasket se completó con Jada Stinson, también de Puerto Rico; Elemy Colomé, de República Dominicana; e Imani Tate y Anisha George, ambas de Islas Vírgenes.
Sin dudas la gran clave del campeón. Por las manos de la experimentada Pamela Rosado pasó prácticamente todo el juego de Puerto Rico. Temperamento, una calidad y un físico de una jugadora en su plenitud pero con la experiencia y jerarquía que solo aquellas atletas de mil batallas, prodigiosas y tocadas por la varita pueden presumir. El cerebro del entrenador Jerry Batista dentro de la cancha, tiempista y con una labor infalible contribuyendo en todos los rubros.
No necesitó ser la máxima goleadora o rebotera, porque su juego fue determinante en todo momento y eso permitió que tenga promedios de excelencia: 13,5 puntos, 5,8 rebotes, 6,0 asistencias y 1,3 robos en 4 partidos, con una valoración general de 21,0 de media. Otro dato más de lo dominante que fue, es que convirtió 64,5% de los lanzamientos que tomó en todo el torneo, con un brillante 66,7% de efectividad en triples.
La otra gran clave del seleccionado boricua que se bañó en oro. La guardia de Arkansas State, llegó a este Centrobasket después de un gran último año en su universidad donde fue máxima anotadora y asistidora. Por eso había grandes expectativas sobre ella, y no defraudó en absoluto.
Consiguió firmar un torneo con medias de 14,5 puntos, 2,8 rebotes, 2,8 asistencias y 1,8 robos en 21,6 minutos. Con esto hay que decir que fue la máxima anotadora de Puerto Rico en el Centrobasket, y que fue la segunda que más asistió. También tuvo porcentajes altos, con 51,4% de efectividad en tiros de campo. Futuro muy alentador para la joven de 21 años, uno de los talentos que ya se convirtió en realidad dentro del proceso puertorriqueño. Su labor adquiere mayor volumen si tenemos en cuenta que fue debutante no solo dentro del certamen sino también en la selección mayor.
Tate fue uno de los dos grandes factores que condujeron a un talentoso seleccionado de Islas Vírgenes a través de estos días de competencia en el Centrobasket. Una jugadora con muchísimo cerebro, desarrolladora y creadora de mucho juego para el equipo que se alzó con la medalla de plata, y más allá de que aún es joven (25 años), de las más experimentadas dentro de un grupo que conjuga juventud y experiencia por estar en su mejor edad desde la condición atlética.
Gran trabajo de quien ha sido la mejor asistidora del Centrobasket por lejos. Promedió 9,0 asistencias por partido, sacando un registro de 3,0 a su escolta en dicho rubro (la MVP Pamela Rosado, de Puerto Rico). La jugadora del Leganés de España es conocida por esa visión de juego y ese despliegue, y ya es toda una referente tanto en su club como en la selección. Jugadora con actitud, muchísimo talento ofensivo, fuerte físicamente y con mucha frialdad (sobre todo en finales cerrados), Tate es una de las mejores armas del subcampeón.
La pivote fue la otra gran clave de Islas Vírgenes, que reunió más que grandes méritos para hacerse con el segundo puesto del Centrobasket perdiendo únicamente un partido de todos los que disputó (ante Puerto Rico). Y en este orden, sin dudas lo hecho por Anisha George fue de lo más interesante que arrojó un torneo que tuvo grandísimas destacadas dentro del juego interior pero donde la nacida en Saint Croix dominó.
Gran torneo para la jugadora de 22 años y 1,88 metros, que actualmente se desempeña en el baloncesto suizo. El dato es que en todos los partidos que jugó logró un doble-doble en puntos y asistencias, sin excepción. Promedió 20,0 puntos y 13,3 rebotes, con un respetable 64,9% de efectividad, 2,8 robos y 1,5 bloqueos 32,2 minutos. Mucha absorción de juego, le dieron una gran responsabilidad y mostró una marcada madurez y evolución si tenemos en cuenta que en aquel título del Centrobasket 2017, siendo juvenil, no había sido tan desequilibrante (2,4 puntos y 5,6 rebotes en ese torneo donde su seleccionado fue campeón).
