Berenith Román, de la cabina de radio a la Cámara de Representantes

La aspirante a Representante por el Distrito 18 por el Partido Nuevo Progresista, que comprende los pueblos de Aguada, Rincón, Añasco y los barrios Plata y Cerro Gordo de Moca, Berenith Román Valle, dio a conocer esta semana que recibió la certificación de la Comisión Estatal de Elecciones, que cumplió con los endosos requeridos para la posición.

La también locutora, es aguadeña de nacimiento, segunda de cinco hermanas, todas hijas de Juan Román Cortés (que en paz descanse) e Hilda Valle. Dedicada a la fotografía profesional, a la radio y a laborar en la industria farmacéutica. Cursó tres años de universidad, los cuales pausó para contraer matrimonio y formar una familia de tres hijos y tres nietos.

Incursionó en la radio, donde ejercicio como locutora, operadora de control, productora y moderadora en WABA 850 AM de Aguadilla. Hoy día cursa estudios para completar su grado de bachiller en el Programa de Estudios Liberales de la Universidad Católica. Ha sido galardonada por producciones en la radio y por su labor periodística.

La aspirante a Representante por el Distrito‭ 18 por el PNP, Berenith Román Valle

En su trayectoria política, ha figurado en funciones como coordinadora y subcoordinadora de unidad y funcionaria de colegio. Electa en primarias para ocupar un escaño como legisladora municipal y candidata a vicepresidenta del Partido Nuevo Progresista en Aguada. Completó su experiencia laboral como directora de Relaciones Públicas de este municipio.

«Tengo un deseo genuino de aportar al desarrollo y bienestar de los municipios y sectores que conforman el Distrito 18, de la misma manera las constantes quejas a través del programa de radio, que recibía, la falta de voluntad por parte del actual representante, en canalizar y resolver asuntos básicos en las comunidades me impulsaron a aspirar. Le añadimos la falta de empatía y el olvido de visitar los sectores menos aventajados y la poca divulgación y orientación de prevención de los casos de abuso sexual infantil y a adolescentes en las escuelas y los núcleos familiares. También muy importante para mí, las consecuencias emocionales, económicas y en todos los aspectos que afecta a la familia cuando se vive en un círculo de violencia doméstica o de género, de la cual fui víctima en carne propia», expresó Román Valle.

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