Durante una vista cameral de la Comisión de Agricultura, que investiga los problemas en la distribución de estos fondos
La Asociación de Agricultores de Puerto Rico denunció a la Cámara de Representantes su insatisfacción con el desempeño del Programa Renacer Agrícola de Puerto Rico (Re-Grow Puerto Rico) ante los obstáculos que ha enfrentado este sector para recibir los fondos bajo este proyecto de desarrollo agrícola presupuestado en $92.5 millones.
En una vista pública de la Comisión de Agricultura, que preside el representante Jorge Alfredo Rivera Segarra, un grupo de agricultores presentó sus quejas e inquietudes con el proceso ejecutado por el Fideicomiso para Ciencia, Tecnología e Investigación de Puerto Rico, entidad encargada de desembolsar las subvenciones para pequeñas y medianas empresas agrícolas desde agosto de 2020.
Hasta la fecha, solo 105 agricultores han recibido las subvenciones del Fedeicomosio de un total de 1,800 aplicaciones sometidas. Según la directora de Re-Grow Puerto Rico, Bárbara Rivera Chinea, el programa ha otorgado fondos que ascienden a $6 millones.
“Semanalmente, la Asociación de Agricultores recibe decenas de llamadas y comunicados de los agricultores expresando sus disgustos y experiencias con el personal del Fideicomiso de Ciencias con el proceso en general. Muchos nos han indicado que han desistido en su interés de continuar con la iniciativa de solicitud”, expresó el presidente de la Asociación, Héctor Cordero Toledo.
Ante este panorama, la organización solicitó reunirse con el secretario de la Vivienda, William Rodríguez, para discutir los disgustos de los agricultores y sus experiencias con el personal del Fideicomiso. Un primer encuentro fue pautado para el pasado 5 de octubre y, luego de ser cancelado, fue movido al 13 de octubre.
Sin embargo, la segunda fecha también fue cancelada días antes de llevarse a cabo por otros compromisos del titular. Cordero Toledo indicó que solicitó una tercera oportunidad para reunirse, pero al momento no ha recibido comunicación por parte de Vivienda.
“Reclamamos sentido de urgencia y empatía con nuestra clase agrícola. Ante la realidad que vive el mundo, los problemas con la producción y la cadena de suministros que se destapó a raíz de la pandemia, debemos ser consecuentes con tomar medidas que incentiven la producción local”, manifestó el agricultor.
La Asociación reclamó una falta de conocimiento en lo concerniente al “mundo agrícola” por parte del Fideicomiso, lo que ha desembocado en atraso en los procesos administrativos, establecimiento de métricas que no son cónsonas con el quehacer de este sector y falta de capacidad del personal que evalúa los casos.
Según el presidente del gremio, el promedio de tiempo que toman en evaluar los casos es mayor a ocho meses, lo que provoca que muchos de los documentos pierdan vigencia en manos del Fideicomiso. Además, la entidad evaluadora solo cuenta con dos agrónomos para atender toda la isla, y la información que solicitan en las revisiones “revela la preocupante falta de empatía sobre los temas que afectan a los agricultores”.
“Nuestra recomendación en todo momento es que sea entregado al Departamento de Agricultura. El Departamento de Agricultura tiene la experiencia, tiene ocho regiones a través de toda la isla. Y en cada una de las regiones ellos tienen personal que conoce de primera mano al agricultor, que sabe las necesidades”, sugirió Cordero Toledo.
La representante Mariana Nogales Molinelli propuso que Vivienda revise el contrato ante el “incumplimiento” del Fideicomiso, al tiempo que alertó que la totalidad de los fondos podrían quedarse sin subvencionar para la fecha de culminación del acuerdo en el 2023.
La legisladora recomendó, por otro lado, que se contemple el Servicio de Extensión Agrícola de la Universidad de Puerto Rico (UPR) como la entidad evaluadora subrecipiente de los fondos. “El Fideicomiso creo que ha sido el error desde el inicio. Se escogió una instancia que no tenía la pericia… Yo le cancelaría el contrato por incumplimiento, y que devuelvan lo que se utilizó mal”, señaló.
Aunque reconoció los cuestionamientos generados, Rivera Chinea defendió la gestión del Fideicomiso y enfatizó que la asignación de $92.5 millones no corresponde a la cantidad otorgada para manejar el programa. Explicó que los fondos incluidos en el acuerdo como subrecipiente totalizan $30 millones, de los cuales $20 millones son para subvenciones.
El ente aseguró que ha tenido nuevos retos administrativos, pues durante los meses de septiembre y octubre han recibido nuevas directrices de Vivienda que implican cambios en los procesos de revisión y una documentación mayor de parte de los solicitantes.
No obstante, Vivienda desmintió los señalamientos y argumentó que, en diversos casos, la agencia se ha topado con falta de documentación por parte del Fideicomiso, lo que resulta en un atraso en el proceso de otorgación de subvenciones.
La licenciada Maytte Texidor, secretaria asociada del programa CDBG-DR, informó que Vivienda ha contratado tres compañías para el manejo de casos y otra empresa de suscripción con el fin de agilizar las solicitudes. Además, la funcionaria aclaró que el acuerdo establecía un presupuesto inicial de $32 millones para el Fideicomiso ante la falta de disponibilidad de la totalidad de los fondos.
“Obviamente, debido al desempeño que ha tenido el Fideicomiso, el Departamento de la Vivienda no ha enmendado ese contrato para darle dinero adicional, porque nos preocupa que el dinero no se gaste dentro del término que se tiene que gastar”, dijo Texidor, quien afirmó que “no se ha visto el adelanto que se esperaba”.
Por su parte, Rivera Segarra repudió el retraso en la entrega de subvenciones, pues la meta de Vivienda cuando se estableció el programa era que se atendieran 120 casos al mes. A preguntas del representante, Rivera Chinea no pudo precisar la cantidad oficial de casos que son completados mensualmente.
Desde su última comparecencia a las vistas públicas, en agosto, el Fideicomiso entregó subvenciones a 31 agricultores adicionales a los 74 que había informado para esa fecha.
“Aquí se contrató un Fideicomiso para que haga un trabajo y cumpla con unas responsabilidades que hasta el día de hoy no se ha hecho”, reclamó el legislador. “Está en ustedes en el Fideicomiso, está en el Departamento de la Vivienda, que este caos se resuelva”.